21 marzo, 2011

Bernat, alguien te ama

alguien te ama
Tengo un coche negro y además, con los cristales tintados así que, oscuro de narices. El polen de primavera, el polvo del camino de las playas en verano o, las lluvias de barro repartidas a lo largo del año, lo convierten en un candidato perfecto a pizarra donde expresar sus emociones los viandantes creativos.

Existen tres tipos de grafiteros (o artistas del graffiti):

Los que se dedican a plasmar su firma por donde pueden (no es un sistema muy diferente al usado por los perros por árboles y farolas). Son los Pakosky 82 que leemos por los puentes de las carreteras y estaciones de trenes.

Los, llamémosles... artistas, que crean un dibujo, una imagen dónde antes no había nada. Esos son más caros de ver, pero producen los fantásticos retratos que los Pakosky 82 acaban estropeando.

Y por último, los que expresan una opinión o un sentimiento. En este grupo podemos englobar a los simpatizantes políticos, a los rebeldes inconformistas y personajes varios.

Algunos de los pertenecientes a este último grupo (aunque ellos quizá no lo sepan), son los que visitan mi coche.