14 diciembre, 2011

allí sí hay monstruos y cosas raras

Pertenezco a ese 13% de españoles que se conectan a internet desde la cama, antes de levantarse. Lo reconozco. Ventajas/desventajas de ser soltera en este siglo... Es que lo tengo ahí, en la mesita de noche junto a un pequeño montón de libros que me haría mucho mejor leer.
De hecho, yo no compro prensa -excepto cuando aparezco por motivos laborales por uno de nuestros maravillosos eventos. Esos días TODOS deberíais comprar los periódicos. Esos días, hasta yo lo intento, lo intento y a veces... lo consigo.- De modo que, esa primera hora de la mañana es la única prácticamente en que, gracias a los titulares de los grupos de todas esas redes sociales, voy curioseando link a link hasta llegar a las noticias de la actualidad. También entro en la rueda de extender alguna pero, salvo excepciones en que me encuentre especialmente indignada, trato de hacer circular esas otras mínimas y escasas noticias que encierran esperanza para este mundo. ¿Qué más puedo decir? Yo soy así; más que feliz, lenta y ¿de qué me iba a servir reenviaros las terribles noticias que vosotros, la "gente normal" ya habéis leído o incluso habéis compartido conmigo?

Y aunque, ya pocas cosas me/nos sorprenden, aunque ya hemos hecho de la decepción una compañera de camino al trabajo ¡qué caray! Hoy pensaba enrollada en mi edredón con la Blackberry diciendo tonterías en mi mano, ¿Qué se le pasará por la cabeza al que se despierte de un coma de dos, tres, cuatro años? Pensará que sigue soñando, que está en alguna fase REM o bajo el efecto de las drogas, ¿Hay una alemana gobernando España? ¿Qué la SGAE qué? ¿Qué Urdangarin cuánto? ¡Anda ya! ¿Van a retirar la asistencia sanitaria a los parados de larga duración? ¿Cómo puede ser eso? Jamás lo consentiríamos. Porque de deuda, parados y crisis se habló siempre, pero ¡espera a que vean la que vivimos ahora!

Y entonces, entre los titulares de las redes aparece, por ejemplo, un chiste y te ríes y piensas “luego se lo cuento a mis amigas” y quedas con ellas para salir gastando mucho menos de lo que hubiéramos gastado hace unos años o, para ser más exactos: mirando lo que vamos a gastar porque cuando no es una, es la otra o somos todas las que deben medir sus números y hablamos un poco de todo esto: de que te suben la hipoteca y no tienes ni idea de cómo vas a pagarla, del trabajo del que te despiden, del que querrías dejar pero no te atreves, de que por fin te han contratado pero te han advertido de que no saben cuándo vas a cobrar porque dependen de subvenciones que no llegan, que no llegan... Y aún así, "tal y como están las cosas", te quedas. Pero luego alguna saca el tema, por ejemplo, del calendario de Bomberos, al igual que podría ser el Madrid-Barça, la película de estreno, el novio de alguna, nuestros hijos, el crucero que haremos todas cuando por fin, tengamos dinero... Y no es frivolidad, no es ceguera a la realidad ¡Cómo va a serlo! Es supervivencia. Porque si solo nos dejáramos envolver por este estiércol, no es que no nos levantaríamos de la cama mañana; simplemente, nos asfixiaríamos. Explotaríamos. Solo eso; todo eso.

Muy buenos días a todos. Y buenas tardes, y buenas noches.

Ikea ha visto claro que cada día hay más gente que no saldría de la cama


Mahou tampoco ha querido quedarse fuera de la crisis y, sea como sea,
de que hemos de encontrar el motivo (y el modo) con el que brindar

Entradas relacionadas:

No hay comentarios:

Publicar un comentario

y tú, ¿qué opinas?